Los musulmanes adoramos a Dios, El Creador y Señor de Universo, Compasivo y Misericordioso, Uno y Única Divinidad. Tal como dice el primero de los diez mandamientos del catolisismo, «No habrá para ti otros dioses delante de mí. No te harás escultura ni imagen alguna ni de lo que hay arriba en los cielos, ni de lo que hay abajo en la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra. No te postrarás ante ellas ni les darás culto» (Ex 20, 2-5).
En el Corán, libro sagrado de los musulmanes dice también algo muy parecido:
“¡Oh, humanos! Adorad a vuestro Señor Quien os creó a vosotros y a quienes os precedieron, para que así seáis piadosos.” [al-Baqarah 2:21]
“¡Ése es Dios, vuestro Señor! No hay más divinidad que Él, Creador de todas las cosas. Adoradle, pues. Él es el protector de todas las cosas.” [al-An’aam 6:102]
“Tu Señor ha ordenado que no adoréis sino a Él y que seáis benévolos con vuestros padres. Si uno de ellos o ambos llegan a la vejez, no seáis insolentes con ellos y ni siquiera les digáis: ¡Uf! Y háblales con dulzura y respeto.” [al-Isra’ 17:23]
Allah (Al-lah) es la misma palabra que en español usamos, El Dios, pero en letras trasliterales al español, del árabe, es decir, los árabes usan la palabra Al-lah (Allah) para cuando se refieren a Dios. En árabe se escribe así الله, pero no sabemos leerlo por lo que lo representan con sus equivalentes en el abecedario del español. Sin embargo destacamos que no es necesario decirlo en árabe, se puede mencionar o hacer referencia a Él con la palabra Dios.
Hay quienes dicen que los musulmanes le llaman así Allah, porque esa palabra no tiene género ni número, lo cual no es correcto ya que diosa se escribe así en árabe الآلهة, dioses الآلهة y diosas آلهة, es decir, el sustantivo también tiene plural y femenino en árabe, por tal no es un argumento válido para tener que referirse a la Única Divinidad con la palabra Allah, se puede nombrar El Dios, o Dios, lo importante es que queremos decir con esa palabra.
Los musulmanes, al igual que los cristianos, creemos que Jesús (llamado «Isa» en árabe) fue un profeta de Dios y Mesías, quien nació de la virgen María.
El Corán sitúa a Jesús entre los más grandes profetas y lo menciona con varios títulos. La profecía de Jesús es precedida por la de Yahya (Juan el Bautista) y sucedida por Mohammed, de quien se dice que Jesús profetizó usando el nombre de Ahmad.
Cabe mencioar que los musulmanes no consideramos a Jesus como hijo de Dios, ya que El Corán narra: “Di: ‘Él es Allah, Uno. Allah es el Absoluto. No engendró ni fue engendrado. Y no hay nada ni nadie que sea semejante a Él’” (Corán 112:1-4).